lunes, 19 de diciembre de 2011

La pesadilla más dulce.


Hoy derramo una lágrima más, por ti. Por la nostalgia, por la pena, por la falta de entendimiento. Por la falta de perdón. 
Hoy siento con fuerza cuanto te amo o cuanto te amé, no lo sé. ¿Los sentimientos tienen tiempo? ¿Caducidad?
Porque aún recuerdo con nitidez el día que acaricié tus manos con la delicadeza de quien se pasea por los recuerdos de su infancia. El día en que abrí una puerta que nunca más conseguiría cerrar.

Y solo Dios sabe el porqué de que aún me atormente este sentimiento. Le he pedido mil veces que lo arranque de mí;  que me ayude a olvidar.
Pero te sueño y se acaba todo. O mejor dicho, vuelve a comenzar la pesadilla más dulce, que es amarte.

No tiene sentido, yo sé que no lo tiene, pero dile eso a mi corazón que se empeña en amarte, aun sabiendo que es imposible.

Hay mil puertas en mi corazón. Las mil me llevan a ti. Cada una abre un recuerdo.
Algunas puertas guardan miradas, otras lágrimas, sonrisas, caricias.
La puerta más grande es la puerta de una promesa “Siempre serás la reina de mi corazón y de mi casa”.

Esa promesa no se hace.Porque mi corazón no la ha olvidado y quiere seguir reinando entre tus recuerdos y tus deseos.
Esa promesa no se hace amor.

Hoy sigo amándote.

Para: JAFB




"Hoy he vuelto a soñar contigo, y ya han pasado casi diez años. Estoy un poco cansada la verdad, de no poder pasar página. Te odio tanto como te amo. Aún."

martes, 29 de noviembre de 2011

Vida...

Vida, déjame superarte, permíteme ser fuerte.
Vida, déjame tejer mi felicidad con hilos de perseverancia.

Vida, déjame crear para mí una vida, déjame un poco de suerte.
Vida. Vida, a veces tan dulce y otras tan amarga.

Vida, déjame ser quien se sobreponga a tus trampas sin pasar por encima de nadie.
Vida, permíteme sentir perdon por los errores del pasado y arrepentimiento por los que cometa en el futuro.

Dejame crecer pero ser eternamente joven.
Déjame vivir para contarte, contarte cuánta vida hay dentro de mí.

Vida, no me hagas una víctima de tus caprichos. No olvides que no eres dueña de mí, y recuerda que tenemos el mismo dueño.

Vida, no te burles de mí con tus ironias, y déjame soprenderte con las mías.
Vida, solo déjame vivir.

domingo, 27 de noviembre de 2011

Mi programa de radio ^^

Este es un fragmento del primer episodio de Un paseo por las aguas (sí, inspirado en mi último post)

Slow Your Breath Down

lunes, 21 de noviembre de 2011

Un paseo por las aguas.


Me gustaría que fuese la inspiración lo que no me dejase dormir. Últimamente lo que me quita el sueño son las preocupaciones, el qué hacer, cómo hacer, no equivocarme. Algunas mañanas me despierto con un sentimiento fatalista que es capaz de amargarme el día. Entonces oro, pienso que he tirado demasiado de la cuerda y está a punto de romperse. ¿Cuántas veces aun habiendo descubierto lo que nos da la vida vamos dejando pasar el tiempo sin usar “la llave” que abre las puertas?
Sí, existe una llave, pocos lo saben, y los que lo saben lo olvidan. Yo olvido.
He pasado muchos días sin venir aquí. Posponiendo una cita, por pereza, por despiste, por un desequilibrio de mis prioridades. ¿Por qué me cuesta tanto hacer uso de” la llave” que abre todas las puertas? ¿Por qué reacciono cuando siento que la tormenta está justo encima y el barco se hunde?

Existen unos pequeños radares situados en varios puntos del mar de nuestra alma. Nos alertan de diversas formas para que no nos salgamos de la ruta. Para que no nos caigamos por el borde.
Estas sensaciones que a veces tengo de mañana, son alertas de que me estoy alejando, de que me estoy endureciendo. Entonces si soy lista, retomo. Medito. Escucho. Rectifico. Agradezco y vuelvo a pasear por las aguas.

       

Cuando no existe tormenta puedo disfrutar del paisaje, entender por dónde andas y seguirte. ¿Porque quiero seguirte no? Ese era el plan…
A veces pienso que sería interesante inventar una forma de tener “la llave” siempre delante de mis narices, para no olvidarme nunca de usarla, pero seguramente en algún momento –no muy lejano- del viaje decidiría que me estorba y volvería a guardarla quién sabe dónde. Volvería a olvidarla, a obviar el hecho de que es fundamental volver aquí. A esto. A TI.

Recuerdo una historia.
Un barco, una tormenta, un hombre durmiendo.
Imagino miedo, desconfianza, impotencia.
Escucho gritos de pavor, truenos y relámpagos.
Siento el frio de un viento despiadado que amenaza con lanzarme fuera, al vacío.
Entonces miro alrededor y estoy dentro. Dentro de un barco a la deriva en medio del mar, entre hombres desesperados. La lluvia me azota, la corriente me zarandea, siento el frio y el horror. Entonces descubro que hay alguien que duerme. ¡Que duerme!
En medio a toda esta locura alguien simplemente descansa. Intento agarrarme dónde puedo para no caerme por la borda.
Veo todo el alboroto y empiezo a entender. Toda esta gente. Este barco. Este barco soy yo. Esta gente son mis miedos. El que duerme es “la llave” escondido en un rincón de mi ser, casi olvidado. Entonces apresuradamente le despierto a gritos y le digo: ¡Nos hundimos! ¡No hay control! Él abre los ojos, se levanta y le dice al viento, a la lluvia, al mar, a mí: Calma
Y todo se calla. Todo se calma.
Y mirándome serenamente a los ojos me dice: ¿Por qué tienes tan poca fe? Ven, demos un paseo por las aguas.
Entonces entiendo que todo está bajo control. Todo…
Hoy vuelvo a TI, calma mi ser, mi tormenta interior. Apaga el fuego, el ruido. El mundo arde porque ha de arder, pero que tú y yo entendamos que bajo sus alas hay cobijo. Bajo sus alas.

Mil tormentas azotan el mundo, mil tormentas de miedo, hambre, desesperanza, crisis y muerte. Mil tormentas de sufrimiento, de ceguera, de escasez. Mil tormentas de orgullo, de autocomplacencia, de estupidez. Y mil tormentas de pecado.
Una llave. Mil tormentas y una llave. Todos han oído hablar, muchos la conocen. Todos la olvidan, la pisotean, la escupen. Y las mil tormentas son una gran tormenta. Un diluvio y el mundo sigue a la deriva, con un hombre que duerme dentro del barco. Con un hombre que duerme dentro del barco…

Está en tus manos despertarle o no. Voy a dar un paseo por las aguas.


Precioso himno de  Mary Ann Baker un clásico.

domingo, 30 de octubre de 2011

Kesia y sus "Quartos"

Una vez más, Madrid sirve como escenario y como punto de encuentro. Un centro musical emergente de talento en masa que fabrica y da a luz un sin fin de nuevas formas y sensaciones. Arte en estado puro, que supura sin remedio alguno, y se manifiesta arrollador allá a donde va. El capricho del arte, hace que cuatro personas encuentren juntas la manifestación palpable de una de sus formas y deseen deleitarse invocando en su idioma y con sus dones, la MAGIA de la música naciendo así Kesia & Quartet…. 

Kesia & Quartet en sala Heineken


Así es como presentaba el proyecto de Kesia & Quartet hace unos años. Surgió como un accidente, sin que nadie lo esperara. Nuestro segundo ensayo que en realidad fue un concierto, fue un momento mágico para todos. Fue tan sencillo que funcionase que creo que todos nos asustamos.
Fue este momento, este exacto momento cuando supimos que algo pasaba y no sabíamos qué…




Hasta hoy cada uno de los Quartet lo recordamos con muchísimo cariño.

La complicidad tanto en el escenario como fuera de el hacía que nos gustase estar juntos, tocar juntos, aunque fuese solo eso y solo nosotros. Recuerdo el día que vinieron 7 personas a bolo nuestro, 7 personas nada más!!! Cuando terminó el concierto, en vez de estar desilusionados nos gastamos el poco dinero que habíamos recaudado y nos tomamos algo juntos y lo celebramos como si acabásemos de ganar un disco de oro. Era mágico. Recorrimos en poco mas de 3 meses las salas más importantes de Madrid.


Fue todo un privilegio compartir escenario, horas y risas a vuestro lado, y espero que pronto podamos reunirnos de nuevo, para simplemente pasarlo en grande como siempre hacíamos.

sábado, 29 de octubre de 2011

Hoy hace un año...

Hoy hace un año desde que mi papá nos dejó.

Ha sido un tiempo muy difícil para nosotros, supongo que quien ha pasado por algo así sabe qué tipo de dificultades emocionales te puede traer la pérdida de un ser querido y tan importante en tu vida.

El caso es que hoy tan solo un año después y al mismo tiempo después de doce largos meses, el dolor y el tiempo parecen haber perdido noción o medida.

A la vez que siento el peso de estos meses como años en mi alma, siento como si fuese ayer mismo; Y al mismo tiempo que un gran dolor permanece por la pérdida de mi padre, siento una gran esperanza que alivia todo dolor, que responde toda pregunta ...Mi padre, está con Él.

Nada de lo que pudiera haber vivido a nuestro lado como padre, como marido, como hijo, como hermano, como tío, como amigo, se compara al increíble y maravilloso hecho de que no podría estar mejor; Al maravilloso hecho de que está con Jesús, aquel por quien vivió toda su vida, y a quien se la entregó cuando el cielo decidió que era su hora.

No puedo ni me atrevo a cuestionar a Dios en sus perfectos planes, sé que Él es conocedor de los tiempos, y de sus propósitos. Pero si en algún momento en toda confianza hablo con Jesús y mis lágrimas le preguntan por qué, Señor, ¿Por qué papá se fue? Señor, ¿Por qué tenemos que pasar por esto?... Una paz más grande de la que haya podido sentir nunca entra en mí, y cobran sentido todas las cosas: Que estamos aquí por un tiempo. Que una vida sin propósito está muerta. Que tengo un llamado en mi corazón. Que deseo vivir como papá lo hizo. Que deseo encontrar a Jesús un día cara a cara. Que Él es mi vida, mi aliento, mi fuerza, mi inspiración. Que no hay regalo más grande que encontrar a Jesús, que amarle, que conocerle, vivirle, sentirle.

Así como en un sueño mi padre me decía: No importa que yo esté muerto o vivo, o que tú estés muerta o viva. Lo importante es que los que estáis vivos tengáis el Espíritu de Cristo.

Hoy me digo a mí lo misma. Estoy de paso, y quiero vivir para Él, y para poder llevar con mi vida el mensaje, de que Jesús está ahí para todos, de que Él es el único camino.De que nada se compara a su amor.
Espero que los que ya creemos, no nos dejemos engañar por las cosas banales de la vida y olvidemos el verdadero significado del Amor de Dios. Porque si lo comprendemos seremos abrigo en el invierno, agua en el desierto, familia para quien no tiene. Madres, padres, hermanos, de quien lo necesite. Cobijo para el desabrigado, una mano para el solitario, un camino para el perdido y así un millón de manifestaciones físicas del Amor.
Si lo comprendemos, seremos esperanza para este mundo. Si lo olvidamos, el mundo está perdido.

Quiero aprovechar, para agradecer a TODOS, los que estuvieron a nuestro lado independientemente de la manera. A todos los que me ayudasteis a traer el cuerpo de mi papá a España. A todos los que con un abrazo, un mensaje, una llamada os hicisteis participasteis de mi dolor y ayudasteis a llevar la carga. A toda la familia, especialmente a Marisol que fue un brazo fuerte en quien agarrarnos (Dios te usó). A todos los amigos que estuvisteis ahí (algunos capaces de hacerme reír en los momentos más insospechados-Verdad Dani? Only you-).

A muchos que no eran amigos y se solidarizaron con nosotros convirtiéndose en ángeles :)
Gracias de corazón…

Hace un año que papá se fue con Dios, y tengo paz, mucha paz.



Gracias por leer esto



Kesia

martes, 14 de junio de 2011

Las puertas del dolor.


La primera es la puerta del sueño. La segunda es la puerta del olvido. La tercera es la puerta de la locura. La última puerta es la de la muerte...
Del libro El Nombre Del Viento.

lunes, 2 de mayo de 2011

Gracias...

Gracias por andar, gracias por sanar,
por enseñar, por escuchar, por perdonar.

Gracias por servir, gracias por soñar,
Por luchar, por limpiar.

Gracias por llorar, gracias por reír,
Por gritar, por callar.

Gracias por hablar, gracias por levantar,
Por resucitar, por construir, por derribar.

Gracias por pararte, gracias por mirarme,
Por venir, por morir, por esperar tu muerte.

Gracias por no negarte, Gracias por entenderlo,
Gracias, gracias, gracias por amarme.

Y por dejar que rasgaran tu piel, y por dejar que atravesaran tu costado,
Y por sangrar, sangrar de amor.

Gracias por llover tu gracia, Gracias por sembrar tu noticia.
Por desafiarme, por salvarme, por romperme, por restaurarme.

Gracias por hacerme entender, que no solo he de aceptar, si no comprometerme.

Gracias por ser mi salvador, pero ser también el Señor de mi vida.

Gracias por contestarme, por inspirarme, por cantarme hasta que duermo entre tus brazos.

Gracias niño desarmado y débil,
Gracias brazo fuerte,
Gracias brisa sutil.

Gracias mi CRISTO por vivir y por morir, gracias por resucitar, y prometer que volverás.

….gracias, gracias, gracias, gracias…………..

lunes, 14 de marzo de 2011

El Nombre Del Viento.

Hoy escribo para recomendaros un libro.
Un libro que me ha dejado enganchada, incluso después de empezar a leerme otro, creo estar leyendo El Nombre del Viento..
Aquí podéis leer el primer capítulo del libro.
Compradlo y leedlo porque estoy segura de que no os decepcionará..

Patrick Rothfuss - El nombre del viento

martes, 22 de febrero de 2011

Como duerme el amor...

Hay días en que el sol no sale para mí, es el viento el que azota mi cara y el frio agrieta mi piel.

Hay días en que las lágrimas bajan solas, y cede mi alma cansada de tanto peso y la esperanza no es más que una palabra que me agota por saber que me falta.

En días como hoy, tus ojos son el recuerdo de que no te tengo, una pesadilla más añadida a las que ya existen en mí. Un sueño roto, como una vasija decorada con los mejores trazos de amor y color que no llega nunca a tener dueño, antes bien es arrojada y pisoteada por la desesperanza de que la vida es un lugar obscuro, pequeño y deforme, donde las almas crean callos al rozarse unas con otras por sobrevivir.

¿Te sobreviviré? ¿O caeré en mi propio olvido cuando intente recordar quien era y no consiga hallar una parte de mí con vida entre tanto desorden, entre tanto vestigio?

Otra vez hoy, no tengo respuestas, pero tampoco discordia, todo mi ser concuerda en una misma melodía triste, tan densa como la muerte tan dura como la vida.

Y me apago con los días como se apaga una flor, como se marchita una vela, como se duerme una estrella palpitando azul en el infinito del cielo cuando nadie la ve.
Y me duermo, no como duerme un niño, pero si como duermen las cosas que ya no se mueven, como duerme el deseo de un moribundo, como duermen las piedras, como duerme la justicia. Como duerme el amor.

lunes, 31 de enero de 2011

Compartir...

¿Has tenido alguna vez la sensación de estar realizando un sueño, solo porque lo compartes con alguien?
¿Alguna vez no has sido capaz de disfrutar completamente de una situación, alegría solo porque no tenías con quien compartirlo?
Siento decirte que estamos hechos así, necesitamos compartir, exteriorizar lo que sentimos, lo que anhelamos para que ese sentimiento se vuelva más sólido, casi real…
Necesitamos una comunión, necesitamos ser vulnerables. Las madres suelen ser excelentes oyentes, suelen ser capaces de soñar nuestros sueños con más fuerza que nosotros mismos… ¿Que sería de mí, si mi madre no hubiese soñado mis sueños tantas veces? Ella ha sido mi fe en muchas circunstancias, cuando yo no podía “sola”

Y es curioso, una vez leyendo un libro me di cuenta de que no es tan disparatado comparar a Dios con una madre… Porque El es quien sueña mis sueños.. Es con quien tengo libertad cada mañana, cada noche, de contarle mis deseos, mis pensamientos, mis tonterías, mis errores (cosas que a mi madre no suelo contarle por miedo a que se preocupe). Sé que puedo acercarme cada día y decirle.. Lo he hecho mal o lo he hecho bien. Me encantaría tener eso o aquello. Algún día quiero ser… Plas! y le suelto algo que ni yo sabía que estaba en mí, pero probablemente ya estaba en su corazón. Tengo la libertad de pedirle que me hable, que me GRITE si no le escucho. Tengo la libertad de decirle quien me gusta, que cosas de mi no me gustan. Puedo hablarle de mis amigos, me rio con El cuando voy en el metro y veo algo gracioso, o algo que me ha tocado la fibra sensible. Como aquel día que había un chico tocando el violín increíblemente, y no pude darle nada, pero le dije a El: Si algún día puedo hacer algo por este chico haz que me lo vuelva a encontrar…
Tengo la libertad de decirle: Te amo. Gracias. Eres genial. Me encanta como haces las cosas. Eres un Artista…. Y tantas cosas más, que necesito decirle porque El también se conmueve…
Y El también me habla, con su presencia, con su paz, con un gesto, cada cosa que resulta para mí una revelación, es El en una canción que escucho, en un párrafo que leo.. Siempre es El, porque vamos juntos en todo momento. Y en esas pequeñas cosas que algunos (incluso) yo, creo que no es lo suficientemente sobrenatural para saber que es El… El es tan simple como apoteósico, Tan grande como el más fuerte viento o tan suave como la brisa más débil. En el deposito todo lo que soy, lo que anhelo, lo que espero… y puedo confiar, porque a mí se me olvidan las cosas,, pero a El no y en su debido momento te recuerda algo, o cumple aquello que prometió.
Mis 3 consejos de hoy,, Comunícate, con tus amigos, sé vulnerable. Comunícate con tu mami, que no hay nadie de carne y hueso que quiera lo mejor para ti :P … Y comunícate con El, porque es el ser más alucinantemente perfecto (en todo lo que abarca esa palabra) que puedas conocer, y conocerle cada día, es mi felicidad.
Te amo, Papá… u know…